Cuarta parte.
Verde.Cae la noche a las cuatro de la tarde, el invierno del norte. Hiela la nariz al respirar, pero el frío puede llegar a ser tan silencioso. El camino está helado y vas rompiendo las pequeñas placas de hielo al andar.
Es en esa oscuridad de media tarde cuando me escapo a bailar con los árboles.