Días sin horas

domingo, octubre 22, 2006
 
Parece difícil recuperar la sobriedad de lo normal con el ojo nacarado de hinchazón, pero basta con mirar hacia abajo, literalmente, de vez en cuando para recuperar la forma de los contornos y perfiles. Supongo que, curiosamente, sigue un patrón similar a lo que pueda ser un alma amante. Hinchazón nacarado tras el exceso, luego miras abajo y parece más sencillo.
Esto me recuerda a la forma de afrontar la muerte:
- Negación ( esto no me está pasando a mí)
- Ira ( no dejaré que me pase)
- Negociación ( Dios, si me dejas vivir creeré en ti)
- Depresión ( No hay nada que hacer)
- Aceptación ( Sucede)

Puede ser algo excesivo para un orzuelo pero se me ha estropeado el ordenador.
Ya he aceptado mi orzuelo, pero aun no se va. Espero que él se vaya antes que yo.

Comments:
Usa la llave. Sólo has de encontar la llave que te sea útil en ese puto momento. Es un viejo remedio, pero es válido.

Para el orzuelo usa una pomada, o algo.
 
Publicar un comentario


Sigueme por RSS